En el caso de los niños, el hábito de una buena higiene bucal es más importante si cabe.
Atender desde el primer momento la salud bucal de los más pequeños ayudará a una correcta formación de sus dientes, la alineación de la mordida y la salud de sus encías.
Es muy importante que los niños comiencen de manera correcta el camino para tener unos buenos hábitos de salud bucal. Por supuesto, hay que enseñarles cómo cepillarse los dientes y usar el hilo dental correctamente todos los días, pero no hay que olvidar que los niños también necesitan que les limpien los dientes de forma profesional, de manera regular, si tienen sarro acumulado sobre sus dientes. De hecho, la limpieza dental profesional en niños es tan importante para ellos como para los adultos.
¿En qué consiste una limpieza dental en general?
Lo que primero debemos saber es en qué consiste una limpieza bucal profesional o en términos más profesionales una tartrectomía. La tartrectomía consiste en la eliminación mecánica con instrumentos manuales llamados curetas o en su defecto con los ultrasonidos, de toda aquella placa bacteriana o depósitos duros que no se eliminan de forma total durante el cepillado. Mediante las curetas (instrumentación básica indicada) el dentista raspa los cálculos de sarro hasta su total eliminación de la boca. Con la otra opción el dentista envía unos ultrasonidos a los dientes y estos favorecen que el sarro se despegue de la pared del diente, y por tanto su eliminación de la boca.
Los depósitos duros, conocidos en la jerga popular como “sarro” que se quedan adheridos en la superficie de los dientes normalmente solo se da en los adultos, pero excepcionalmente, hay niños que también necesitan eliminar este tipo de residuos y para ellos deben visitar la consulta de un dentista.
Gracias a la limpieza bucal llevada por profesionales se consigue llegar a todos los rincones de la boca y eliminar cualquier residuo, debemos tener presente, que aunque, se lleve una higiene dental correcta y de forma diaria el cepillo o el hilo dental no llegan a todas las partes de nuestra boca.
¿Cuándo llevar a los niños al dentista para una limpieza dental?
Será el profesional quien determine si nuestro hijo necesita o no tratar esa placa. Por eso es tan importante que el niño acuda a sus revisiones semestrales para que el odontólogo pueda detectar precozmente enfermedades o complicaciones y, si fuera necesario, tratarlas tempranamente.
En las primeras citas del niño en la consulta dental seguramente no sea necesaria la realización de una limpieza. Lo que sí hará el odontólogo es buscar signos de problemas y problemas en desarrollo. Además hará un seguimiento para asegurarse de que los padres ayuden al niño a cepillarse y cuidar los dientes de manera correcta.
No es habitual que los niños tengan sarro en su boca (aunque los hay), pero sin embargo lo que los profesionales si encuentran con bastante frecuencia son tinciones (colorantes dentales) en niños menores de 6 años, que con un cepillado dental son imposibles de eliminar.
Las tinciones son un tipo de bacterias que producen manchas de color anaranjado, negro o verdoso en las piezas dentales de los niños que ademas recubren el margen del diente más
próximo a sus encías. Estas manchas no tienen nada en común con la caries, es decir, el diente no esta socavado ni erosionado sin embargo la coloración es desagradable.
En el caso de niños con mayor edad, las comprendidas entre los 6 y 7 años en adelante, aunque no es habitual ya aparece el sarro y las primera caries (suele aparecer en la parte de los incisivos inferiores que miran a la lengua).
En esta zona de la boca es donde van a parar unas glándulas salivales que hacen que el calculo se deposite en esos dientes. Cuando pasa muy asiduamente o con bastante frecuencia aparece el sarro y la posterior caries.
Consejos: Hábitos, dieta y prevención
• Abordar la higiene dental y la salud bucal desde una perspectiva más pedagógica. Explicar a los más pequeños la importancia de tener unos buenos hábitos de higiene bucal para mantener a raya a las bacterias y evitar la aparición de caries hará que el niño lo interiorice mejor.
• La técnica de cepillado es la parte más importante para mantener una buena higiene y cuidado bucal para niños.
• Potenciar una rutina de higiene completa. Lo ideal en cuanto a hábitos de higiene dental sería que pudieran cepillarse al menos tres veces al día (una después de cada comida principal).
• Asegúrate de darles aperitivos saludables para que no recurran a dulces y comidas procesadas, así que es importante utilizar alimentos como cereales, leche, queso, vegetales y fruta crudos o yogur para ofrecer alternativas al azúcar.
• Concienciar a nuestros pequeños sobre la importancia de tener una dentadura fuerte y sana es fundamental para evitar el desarrollo de enfermedades porque ya todos sabemos que “más vale prevenir que curar”.
• La caries, la gingivitis y los problemas ortodónticos tienen tratamientos mucho más fáciles si se diagnostican y se tratan precozmente, por este motivo, una revisión cada 6 meses permite detectar a tiempo las patologías más comunes, especialmente en los más pequeños.
• Las revisiones semestrales son muy importantes para que el odontólogo detecte estos problemas, evalúe las causas y las elimine, para conservar siempre la boca del pequeño en perfecto estado. También buscan señales de que el niño se está cepillando y usando el hilo dental correctamente y, si no es así, enseñarle al niño cómo cuidar mejor sus dientes y encías.
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